¿Qué es el cuadrado del Nueve?
En esencia, se trata de una herramienta para pronosticar el Tiempo y Espacio (precio), para medirlos de diferentes maneras.
De entre las numerosas técnicas especulativas de Gann, quizá la más célebre es la conocida como el Cuadrado del Nueve, uno de sus sistemas de cálculo más misteriosos.
Durante años, el interés de numerosos estudiosos del mercado se ha concentrado en W.D. Gann, artífice de predicciones muy exitosas. Ávidos de conocimiento, una plétora de especuladores ha tratado de averiguar cómo Gann fue capaz de manejarse con semejante nivel de precisión, lanzando predicciones de mercado tan atinadas. Por ejemplo, en el número dos del quinto volumen de la revista Ticker and Investment Digest (diciembre de 1909) se refiere que Gann realizó 286 operaciones en presencia de William E. Gilley, de las cuales fueron exitosas 264. Por tanto, su ratio de acierto alcanzó un espectacular 92%. En ese período de 25 días que cubre el artículo, Gann fue capaz de doblar diez veces su capital inicial.
La filosofía que conecta el Cuadrado del Nueve con el movimiento de traslación de la Tierra alrededor del Sol se fundamenta en que durante el 21 de marzo acontece la reencarnación de la vida. Después, en el solsticio de verano, esa nueva vida que se enseñorea de los animales, plantas e insectos se encuentra en estado de ebullición.
Posteriormente, alcanzado el equinoccio otoñal, el grado máximo de fruición vital queda atrás y el ciclo de la vida disminuye, deteriorándose en su camino hacia la vejez. El 21 de diciembre, en el solsticio de invierno, la vida entra en estado de congelación, con vistas a resurgir cuando lleguen los rayos solares que trae el equinoccio de primavera.
Gann comentaba que “en La Biblia se sostiene con claridad que hay un tiempo y una estación para todo aquello que está bajo el Sol y que no hay excepciones para esta norma cíclica. La Tierra se mueve alrededor del sol en 365 días. Esto completa el viaje a través de 360º”. El Cuadrado del Nueve se presenta como una herramienta extremadamente rápida para encontrar bloques numéricos que guardan una relación geométrica con los pasados suelos y techos de un gráfico. (Cada tendencia finaliza cuando alcanza un angulo de 360º)
Al decir de algunos conocidos de Gann, éste llevaba una Cuadrado del Nueve en miniatura cuando acudía a especular en los corros de bolsa. Gann creía que cada suelo y cada techo de un gráfico guarda una correlación matemática y temporal con techos y suelos del pasado. Sostenía que nada en la naturaleza se mueve por azar y que en la creación de todo cuanto conocemos reposan las principios matemáticos. Que el universo, en fin, es un compendio de puntos de fuerza matemáticos